Cuando se realizan evaluaciones de riesgo, en la mayoría de los casos, se utilizan los denominados valores por defecto. Estos se aplican en infinidad de ámbitos, como la informática, y constituyen valores estratégicos que se usan para tener en cuenta incertidumbres y para el redondeo de números. En el caso de la seguridad alimentaria, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha presentado una guía para armonizar los valores por defecto que se usan en las evaluaciones de riesgo cuando los datos de los cuales se dispone son insuficientes o nulos.
En la nueva guía se identifican valores armonizados para aspectos como el peso corporal, la ingesta total de líquidos, las concentraciones de principio de precaución y adoptar las medidas que considere oportunas y adecuadas.
Para el desarrollo de todo el proceso de la evaluación de riesgos es necesario contar con algunas definiciones que ayudan a una mejor gestión.
Ingesta Diaria Tolerable (IDT). Cantidad estimada de una sustancia presente en el aire, alimentos y agua potable, que puede ingerirse al día a lo largo de toda la vida, sin que ello suponga un riesgo para la salud.
NOAEL. Mayor nivel de exposición sin efecto adverso observado.
Peligro. Podría definirse como una “fuente de daño”, es decir, la posibilidad de que una sustancia o varias generen, en ciertas condiciones, efectos adversos en la salud.
Exposición. Cantidad de un agente a la que está expuesta la población. Puede hacer referencia a la duración o intensidad.
Riesgo. Posibilidad de un daño a causa de la exposición a agentes químicos o físicos.