La celebración de unos Juegos Olímpicos reúne infinidad de nacionalidades, culturas e idiomas. Este año se celebran en Londres, cuyas autoridades prevén que asistirán alrededor de 15.000 atletas de unos 205 países y hasta 8,8 millones de espectadores. Como parte de un plan riguroso para garantizar la seguridad de los alimentos que se servirán, la Agencia de Alimentación británica (FSA) ha puesto en marcha la campaña “Juega seguro”, que tiene como objetivo garantizar que todos los alimentos que se vendan, se cocinen y se consuman durante estos días sean seguros. La maquinaria que se pone en marcha es compleja.
Cientos de expertos en seguridad alimentaria trabajarán durante los Juegos Olímpicos de Londres para garantizar que los alimentos que se ofrecen cumplen con todas las condiciones de seguridad. La campaña iniciada por la FSA destaca por las medidas adoptadas para minimizar el riesgo de incidentes en la seguridad de los alimentos que se producen en el país. Entre otras actividades, se prevé la implantación de programas de formación a las pequeñas empresas para capacitarlas para el suministro de alimentos y para garantizar que todo lo que venden es seguro. Y es que se calcula que se prepararán unos 14 millones de comidas en las sedes olímpicas, además de las comidas que se servirán a los visitantes.
Mayor higiene en los Juegos Olímpicos
Las empresas alimentarias británicas han recibido información sobre contaminación cruzada, limpieza, cocción y refrigeración
Las previsiones que apunta el Gobierno británico para abastecer de comida a los atletas rondan unas 100 toneladas de carne, 82 toneladas de pescado y marisco, 25.000 piezas de pan y unos 75.000 litros de leche. La necesidad de vigilancia en términos de seguridad e inocuidad es de «vital importancia». Los alimentos tienen que transportarse, a menudo con plazos muy limitados, almacenarse de forma segura y comercializarse de manera higiénica, con frecuencia, en instalaciones temporales o puestos ambulantes. Por este motivo, se debe trabajar de forma estrecha con empresas y autoridades para facilitar el cumplimiento de los reglamentos.
La campaña del Gobierno británico pasa por dotar de los conocimientos sobre higiene y seguridad alimentaria, una fase académica que está a punto de finalizar. Además, se ha dado formación a unos 100 inspectores sobre legislación y técnicas de muestreo. Los principales temas que se tratarán son la contaminación cruzada, la limpieza, la refrigeración y la cocción, así como temas relacionados con el lavado de manos. También se dotará a las empresas de una amplia gama de equipos para el control de las temperaturas.
Control a la venta ambulante ilegal
Uno de los principales retos de las autoridades sanitarias británicas será hacer frente a la venta ilegal de alimentos en puestos que no cumplen con los requisitos de higiene exigibles. Este será uno de los temas que mayores controles recibirá, con el fin de proteger a los visitantes de posibles intoxicaciones alimentarias. En total, la FSA tiene previsto realizar unas 14.700 inspecciones extra de los alimentos entre abril y septiembre de este año, controles que abarcan restaurantes, bares y puestos callejeros.
Los inspectores se enfrentan a uno de los mayores retos en seguridad alimentaria: controlar a quienes quieren sacar provecho del evento con la venta ilegal de alimentos, ya que a menudo incumplen condiciones, como cortes en la cadena del frío. También está previsto evitar que los visitantes entren en el aeropuerto con su propia comida. Un trabajo de esta magnitud es un reto para garantizar que todas las personas relacionadas con los Juegos Olímpicos y los alimentos cumplen los requisitos para que los productos sean lo más seguros posible.
Una de las condiciones que deberán seguirse menciona el reglamento británico sobre higiene de los alimentos, que establece las condiciones básicas de higiene para todas las empresas, instalaciones e higiene personal. Uno de los principales requisitos es que el propietario de la empresa alimentaria sea capaz de mostrar todo lo que elabora y que esté documentado. La FSA ha elaborado una guía práctica sobre la puesta en marcha de un puesto de comida.
El Reino Unido prepara con mucho esmero la celebración de los Juegos Olímpicos para evitar los casos de intoxicaciones alimentarias. Las medidas son multifactoriales y afectan tanto a productores, como distribuidores y comerciantes:
Ayudar a las autoridades locales a mejorar las normas de higiene en las empresas alimentarias próximas a las sedes olímpicas.
Dotar a las autoridades locales del conocimiento necesario para que identifiquen problemas de seguridad alimentaria.
Gestión de enfermedades alimentarias durantes los Juegos Olímpicos.
Coordinar las actividades de toma de muestras.