El roaming de datos sigue siendo el principal obstáculo a la libre utilización de las redes móviles en los smartphones cuando se viaja por el extranjero. La razón: aunque su coste ha bajado, el empleo de la Internet móvil cuando se está lejos de casa se castiga en la factura. Este problema lastra el potencial del teléfono en el extranjero para usos turísticos e informativos, de modo que, según distintos informes de la Comisión Europea, casi uno de cada dos europeos apaga el móvil cuando viaja. Se impide así la apertura de un mercado comercial digital unificado, que generaría cientos de millones de euros cada año. Para romper con el roaming de datos, existen propuestas, como los beacons o las redes híbridas de wifi y telefonía, pero quizás la que tenga más futuro venga de los operadores móviles globales. A continuación, se explican sus ofertas.
Los operadores móviles globales es un término que no tiene una única acepción, sino que engloba tanto a las grandes multinacionales del sector, como la alemana T-Mobile o la americana AT&T -con infraestructuras en más de un país que optimizan para ofrecer la misma tarifa a sus clientes en todos los lugares donde poseen presencia-, como a operadores móviles virtuales (OMV).
Operadores virtuales globales
Estos últimos trabajan en diversos países y pueden ofrecer tarifas especiales para clientes que viajen con frecuencia a zonas bajo su influencia, gracias a los acuerdos que tienen con los operadores locales.
El cliente accede al nodo local de Internet móvil como si fuera un usuario de la zona que operara con el OMV
Al OMV le basta que el cliente tenga una tarjeta SIM de la operadora, para así poderle reasignar un número local en cada país donde viaje y opere, con el fin de que su acceso a la red de datos sea considerado local. De este modo, el cliente accede al nodo local de Internet móvil como si fuera un usuario de la zona que funcionara con el OMV. Una vez que ha entrado en Internet, la señal ya viaja por las redes normales digitales, como si fuera un acceso del tipo wifi, y desaparecen las penalizaciones.
Este sistema es idóneo para utilizar WhatsApp y otro tipo de mensajería instantánea basada en Internet, para comunicarnos con los seres queridos del país de origen. También es un sistema perfecto para usar los servicios de geolocalización para conocer las ciudades como Foursquare, que posee todo tipo de recomendaciones de otros usuarios sobre la región donde se active nuestro GPS. Es decir, podremos abrir todo tipo de mapas y redes de recomendaciones, sin temor a las penalizaciones por gasto de ‘megas’.
Truphone en España
Con el empleo de tarjetas SIM locales en un móvil libre cuando estamos en el extranjero (otra práctica interesante y eficaz para sortear el roaming de datos), si hacemos o recibimos llamadas internacionales, sí que nos cobrarán al precio que fije la operadora para este tipo de comunicaciones, aunque estos son mucho más moderados que hace unos años. Una alternativa es usar servicios que hacen llamadas gratuitas a través de Internet.
Si hacemos llamadas internacionales, nos cobrarán al precio que fije la operadora para este tipo de comunicaciones
En nuestro país, como operador global virtual solo actúa Truphone, un proyecto lanzado por el multimillonario ruso afincado en Londres Roman Abramovich, que busca crear un espacio común de clientes de la compañía allá donde más demanda y posibilidad de negocio encuentre. Si bien de momento se enfoca a empresas y autónomos con necesidades profesionales, en el caso de España su presencia se explica por su valor turístico, que atrae a decenas de millones de personas al año susceptibles de utilizar su smartphone. Pero también beneficia a los clientes españoles cuando viajen a Polonia, Inglaterra, Estados Unidos, Alemania, Países Bajos o Australia, entre otros países donde Truphone también está.
Ofertas de las multinacionales
Algunos de los grandes operadores con infraestructura propia tienen ofertas ventajosas para aquellos clientes que viajen al extranjero
Aunque Truphone es el único operador global destacado, algunos de los grandes operadores con infraestructura propia o acuerdos con otras empresas también tienen ofertas ventajosas para aquellos clientes que viajen con frecuencia y hagan uso del smartphone. En el espacio de la Unión Europea los precios son bastante comedidos, pero para un usuario de Estados Unidos, por ejemplo, donde no existe el roaming, viajar a otros países es un verdadero problema porque las tarifas se disparan y la regulación tarifaria varía mucho de un país a otro.
Por este motivo, tanto AT&T como T-Mobile, las dos mayores compañías de telefonía móvil de Estados Unidos, han lanzado ofertas especiales para viajeros, basadas en aprovechar infraestructuras propias en otros países o bien en acuerdos con otras firmas con las que hay mucha cercanía empresarial. Estas tarifas desgraciadamente solo contemplan usuarios norteamericanos, y no se tiene noticia de que Movistar, con gran presencia en Europa y Latinoamérica, piense lanzar un servicio parecido.