Para emplazar un árbol en el patio es necesario calcular el diámetro actual y futuro del ejemplar elegido, en función del máximo desarrollo que sea esperable para su especie, y realizar el hoyo en el que se plantará con un mes de anticipación a fin de que se airee la tierra. Además, conviene tomar precauciones en el momento de decidir dónde ubicarlo, ya que la mayoría de los árboles afectan, mediante el crecimiento de sus raíces y sus ramas, al suelo y los muros de la casa. A continuación se indican las posibilidades de plantar un árbol en medio del patio, los problemas comunes de tener un ejemplar junto a la casa y cuáles son las especies más apropiadas, y las menos, para este espacio.
Un árbol en medio del patio
Es posible combinar en el patio el encanto y la frescura de un árbol con la practicidad y belleza de un suelo embaldosado. La manera de hacerlo es dejar un hueco en el suelo de baldosas para colocar el árbol allí. Esta es, además, una forma original y menos costosa de lo que a simple vista pudiera parecer.
Lo recomendable es abrir el hueco en el suelo un mes antes de plantar el árbol, para que la tierra se airee
Las medidas del hoyo para instalar el árbol deben superar el diámetro que tenga el tronco en el momento de plantarlo pero, sobre todo, prever el crecimiento máximo que pueda alcanzar para evitar problemas futuros en el suelo y construcciones aledañas.
Además, siempre que sea posible, se recomienda abrir el hueco un mes antes de plantar el árbol, con el fin de que la tierra se airee. Y si antes hubo en ese lugar otras plantas que murieron, será necesario ventilarlo durante varios meses para que se extingan los posibles hongos de las raíces anteriores. Mantener el pozo abierto por varios días facilitará, también, la observación de un correcto drenaje del suelo.
Y por otra parte, al realizar el agujero, hay que tener la precaución de no dar con alguna tubería de riego, agua, gas o electricidad.
Problemas comunes de tener un árbol junto a la casa
Los árboles plantados en el patio generan una sombra fresca muy agradable durante el verano. Sin embargo, en el invierno acarrea algunos inconvenientes. Por eso, una buena opción puede ser elegir especies de hojas caducas, que caigan durante el otoño y permitan el paso de los rayos de sol en los meses de frío.
El riesgo de colocar un árbol demasiado cerca de la casa u otra construcción radica en que el crecimiento de sus raíces deteriore las cañerías, a la vez que algunas ramas quebradizas puedan convertirse en una seria amenaza para la construcción. Por lo tanto, al decidir el tipo de árbol para el patio, es fundamental informarse acerca del volumen que adquirirá cuando alcance su pleno desarrollo al cabo de los años y, por tanto, decantarse por los de crecimiento limitado a fin de asegurar que no deriven en problemas con el paso del tiempo.
Especies de árboles apropiadas para plantar en el patio
En general, los árboles más idóneos para ubicar en el patio son los que no crezcan demasiado, ni sus raíces ni su copa. Entre estos, varias especies de palmeras pueden ser apropiadas. También los árboles frutales, por la misma razón, son comunes en los patios, al igual que especies como los prunus, aligustres y el laurel.
Además, para limitar el crecimiento de las raíces del árbol, conviene tomar algunas precauciones de mantenimiento. Una de ellas es podar cada año la copa, ya que esta medida contiene, a su vez, el crecimiento de la raíz. Otro cuidado consiste en regarlo con frecuencia, para evitar que las raíces se extiendan en búsqueda de agua.
Entre las especies que no se recomiendan para los patios se encuentran los abedules, álamos y aromos, ya que sus raíces tienden a levantar el terreno, mientras que los eucaliptos y las acacias pueden hasta romper una tubería. Por último, las especies paulonia, el ombú y el plátano oriental crecen tanto sus ramas y troncos, que pueden hasta derribar una pared con su peso.