Emilio Alba es jefe del servicio de Oncología Médica del Hospital Clínico Universitario Virgen de la Victoria y, desde el pasado 23 de octubre, presidente de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). En su último congreso en Barcelona, esta organización reunió a 150 ponentes y 1.000 asistentes que analizaron más de 450 estudios en materia de tratamiento, pronóstico, investigación, diagnóstico y prevención del cáncer, que afianzan la tendencia hacia una oncología más molecular y personalizada.
Las novedades que más han llamado nuestra atención han sido las relativas a los tratamientos de cáncer de pulmón, mama y colon, pero también nos hemos fijado en las características especiales que el cáncer de pulmón empieza a mostrar en mujeres, los avances en cáncer hereditario y la reincorporación al mundo laboral de los pacientes después del tratamiento.
Según estimaciones de la Sociedad Española de Oncología Médica, en la actualidad, más de 1,5 millones de personas en España han superado un cáncer, es decir, se han curado. Sabemos que uno de cada tres hombres y una de cada cuatro mujeres se diagnosticarán de cáncer a lo largo de su vida y, cada año, la tasa de incidencia aumenta. Pero también disminuye el índice de mortalidad, lo cual refleja la eficacia de los avances en tratamiento y diagnóstico precoz.
El envejecimiento de la población y la supervivencia cada vez mayor de los enfermos de cáncer han supuesto un aumento significativo del número de pacientes. Sin embargo, asistimos a una de las épocas más productivas en el desarrollo de nuevos fármacos y tratamientos que destacan por aspectos muy importantes como la farmacogenómica. Este concepto nos permite identificar factores predictivos de respuesta, marcadores biológicos y nuevos mecanismos de acción que al final deben conseguir terapias más individualizadas y eficaces.
“Los nuevos tratamientos nos permitirán tratar de modo personalizado a cada paciente, de acuerdo a sus características genéticas y a sus tumores”
Evitarán la aparición de tumores, disminuirá la toxicidad de los tratamientos actuales y, de la mano de la biología molecular, nos permitirán tratar de modo distinto y personalizado a cada paciente, de acuerdo a las características genéticas de los individuos y de sus tumores. Es muy importante aumentar la detección en estadios iniciales, tanto mediante programas de prevención primaria como secundaria. Desde la SEOM vamos a seguir en esta línea. En el tratamiento del cáncer los avances son continuados, pero esos progresos de poco sirven si los médicos no actualizamos conocimientos a partir de la formación continuada.
Una investigación clínica independiente es crucial para el sistema público de salud y, en definitiva, para los pacientes. Los oncólogos médicos necesitamos hacer más ensayos clínicos relacionados con el diagnóstico y tratamiento del cáncer; ensayos que repercutan en beneficio de los pacientes y de toda la sociedad.
Tanto la investigación clínica como la básica gozan de una excelente calidad en España. En los últimos años se ha demostrado que los estudios clínicos realizados en centros de nuestro país han influido en los tratamientos que se realizan no sólo aquí, sino en todo el mundo. La investigación básica ha experimentado un amplio desarrollo en la última década: se han creado centros de investigación especializados en cáncer y redes temáticas.
Un estudio español ha demostrado que los pacientes con cáncer de pulmón no microcítico (CPNM), con una mutación del gen EGFR, podrán recibir tratamiento oral en vez de quimioterapia convencional, con un incremento de supervivencia importante en estadios avanzados de cáncer. Otro estudio, también español, confirma que el cáncer de pulmón registra características diferenciales en mujeres.
Mejores. Es una base de datos prospectiva, epidemiológica y multicéntrica que recoge datos demográficos, hábitos, características clínicas y tratamientos de mujeres con cáncer de pulmón diagnosticadas en 36 hospitales en todo el territorio español. El 74% de las mujeres registradas tenía histología de adenocarcinoma, el 43% no fumaba, el 42% contaba con una historia familiar de cáncer (un tercio, de cáncer de pulmón), con una supervivencia mediana para carcinoma no microcítico avanzado de 17 meses, que confirma un mejor pronóstico.
Así es. Expertos de cáncer hereditario han demostrado por primera vez que hay mutaciones fundadoras en el gen MLH1 en familias españolas con un tipo de cáncer colorrectal, el hereditario no polipósico (CCHNP). Conocer la mutación responsable permite saber qué miembros de la familia la han heredado y, por tanto, establecer medidas individualizadas de diagnóstico precoz.
Según estimaciones de la Sociedad Española de Oncología Médica, en 2010 en España se diagnosticarán más de 200.000 personas de cáncer, una cifra que supone un problema de salud prioritario. El estudio “La atención multidisciplinar en oncología: un paradigma de calidad”, realizado por esta sociedad científica en colaboración con la industria farmacéutica (MSD), afirma que es necesario potenciar los comités multidisciplinares de tumores, de forma que un equipo multidisciplinar y guiados por un médico de referencia valore los pacientes con cáncer.
En España, subraya Emilio Alba, son necesarios 1.200 especialistas de oncología médica, “y esta cifra no se alcanzará hasta 2013”. El presidente de la SEOM añade que el cáncer tiene repercusiones físicas, emocionales y sociales, y todas ellas deben atenderse como corresponde. El estudio mencionado recomienda establecer un circuito de acceso común de los pacientes y un protocolo asistencial que reduzca la variabilidad y fomente que un equipo multidisciplinar considere al paciente oncológico siempre de forma conjunta desde el inicio del proceso diagnóstico-terapéutico.
Albert Jovell, en representación de los pacientes y de sus asociaciones, explicó en el congreso de Barcelona que los hospitales deberían tener en cuenta en su organización las necesidades de los pacientes, y “no sólo de los profesionales sanitarios y de los gestores. De esta forma, en el caso concreto de la oncología, donde participan distintas especialidades de la medicina que llevan a cabo múltiples y diversas actividades diagnósticas y terapéuticas, sería muy importante que los afectados pudieran contar con la figura de un oncólogo-tutor”. Jovell explica que los pacientes españoles confían en sus oncólogos, aunque se hace imprescindible la figura de un oncólogo-tutor que coordine toda la atención sanitaria que se recibe como consecuencia de la enfermedad y que sea el centro de comunicación con el paciente y los familiares.